☕ El Futuro del Café, Un Joven a la Vez
Por Café Tío Conejo
🌍 ¿Por Qué Esta Historia Importa?
En el campo cafetero de Colombia, encontrar manos jóvenes dispuestas a quedarse se ha vuelto cada vez más raro. El trabajo rural, aunque esencial, se percibe como inestable, mal pagado y sin futuro. La mayoría de los jóvenes migra a las ciudades en busca de mejores oportunidades. Mientras tanto, en el mundo del café especial, los consumidores exigen trazabilidad, sostenibilidad y justicia.
Pero, ¿cómo lograr todo eso si nadie quiere quedarse a cultivar el café?
En Café Tío Conejo creemos que los productores con acceso directo a mercados de calidad y precios justos tienen una llave maestra: la capacidad de usar esa posición privilegiada para construir modelos laborales dignos, enriquecedores y replicables para la juventud rural.
No queremos seguir esperando a que alguien más lo haga. Queremos actuar ahora. Por eso lanzamos este proyecto.
🧪 Lo Que Aprendimos en el Camino
Desde 2010, en nuestra finca en Manizales, hemos estado creando un espacio donde vivir y trabajar con dignidad es posible. Comenzamos con un trabajador, su esposa y su hija. Reconstruimos su casa, modernizamos los procesos de poscosecha, contratamos trabajadores temporales y ofrecimos alimentación y alojamiento. Desde el principio, ese primer trabajador estuvo formalmente vinculado y recibió todos los beneficios que exige la ley.
Con el tiempo, sumamos empleados fijos. Les dimos libertad para sembrar, vender y ahorrar. Apoyamos a algunos para que terminaran el colegio y respaldamos su educación técnica.
Durante la pandemia, llegamos a tener hasta 10 empleados de planta, todos con contrato legal, salud, pensión, vacaciones y estabilidad. Pero la mayoría decidió irse cuando regresó la opción de trabajar al destajo —una modalidad que, aunque permite ganar más dinero en el corto plazo, no ofrece protección a futuro ni acceso a la seguridad social.
Ese tropiezo nos dejó lecciones valiosas:
- Los trabajadores mayores no siempre valoran los beneficios formales.
- Los jóvenes pueden proyectar su futuro si el entorno los apoya y estimula.
- Sin comunidad, propósito y cultura, el contrato no es suficiente.
🐇 Nuestro Plan: Construir el Modelo que Soñamos
Queremos convertir esta experiencia en un modelo estructurado, medible y escalable — uno que podamos fortalecer en la finca y compartir con el mundo del café.
Con tu apoyo vamos a:
- Contratar jóvenes y hombres y mujeres cabezas de hogar rurales con empleos de tiempo completo, salario justo y todos los beneficios.
- Diseñar espacios de bienestar: salud física y emocional, cultura, arte, música e inglés.
- Construir una casa-jardín infantil para los hijos de nuestros trabajadores.
- Mejorar las condiciones de alojamiento con espacios dignos y tranquilos.
- Crear un módulo de formación interna en trabajo agrícola, liderazgo y emprendimiento.
- Implementar un sistema de ahorro voluntario y acompañamiento financiero.
- Documentar el proceso con historias, videos y datos para que otros puedan replicarlo.
Pero hay algo que es igual de importante: este modelo se basa en disciplina, participación activa y mérito. Las condiciones serán muy buenas, y por eso pediremos compromiso real.
No buscamos trabajadores pasivos, sino personas dispuestas a crecer, a formarse, a hacer parte activa de un proceso que también les pertenece. Este no es un regalo: es una invitación a competir con propósito, a sostenerse en el proyecto por lo que cada uno construye día a día.
🎯 ¿Por Qué Kickstarter?
Porque queremos hacerlo contigo. No buscamos una subvención cerrada ni depender de instituciones. Queremos construir una comunidad global que crea, como nosotros, que otro café es posible.
Cada dólar que inviertas en este proyecto se destinará directamente a consolidar este modelo. Te compartiremos resultados, historias y—si visitas nuestra finca—te presentaremos a los jóvenes que decidieron quedarse.
Este no es un proyecto asistencial. Es un proyecto estructural. Y empieza con tu apoyo.
Esta campaña no busca financiar una idea. Busca ampliar un modelo que ya está en marcha.
Desde hace años venimos construyendo en la finca un entorno de trabajo digno para jóvenes y cabezas de hogar rurales. Con errores, aprendizajes y pasos reales, hemos demostrado que sí es posible sembrar futuro en el campo.
Sabemos que los 100.000 dólares que buscamos no son suficientes para lograr todo. Pero sí son el impulso que necesitamos para profundizar, sistematizar y compartir este modelo con más personas y más fincas.
Tu aporte no inicia este camino —lo fortalece. Y sobre todo, nos ayuda a demostrar que el campo sí tiene futuro… si lo construimos juntos.
☕ Una Nota Final: ¿A dónde va tu apoyo?
En Café Tío Conejo creemos en la transparencia, pero también en la confianza.
Tu aporte en Kickstarter está destinado a financiar el modelo que acabas de conocer: la contratación de jóvenes, la creación de espacios de bienestar, la formación, la infraestructura digna, el acompañamiento financiero y el registro de todo el proceso.
Como en todo proyecto real, parte del trabajo ocurre fuera de cámara: coordinación logística, procesos operativos y gestiones administrativas necesarias para que todo funcione.
No son gastos ocultos —son las raíces que sostienen el árbol. No prometemos que cada peso se convierta en una foto de Instagram, pero sí que cada paso estará guiado por propósito, honestidad y compromiso.
📖 Una Historia que Escribes Tú También
En Tío Conejo creemos que el café no es solo una bebida: es una excusa para construir relaciones, contar historias y sembrar futuro.
Gracias por creer con nosotros. Gracias por ser parte de esta cosecha de esperanza.
Vamos a sembrar un nuevo modelo. Un joven a la vez.